Ramón Santos
¿Hasta que punto pueden influir las fotografías y los medios de comunicación en las relaciones internacionales?
El periodismo gráfico al igual que el periodismo escrito pueden llegar a ser dos armas muy importantes para contar historia -que lo son en esencia- pero también para cambiar las cosas en el panorama político y social. En el ámbito de la fotografía todo comenzó con la Guerra de Crimea en el siglo XIX (1852-1856) que enfrentó a Rusia con Francia, Reino Unido y Turquía. De allí saldrán los primeros testimonios gráficos del conflicto.
Después llegará la Guerra Civil en Estados Unidos, la Revolución Mexicana, la Guerra Civil española, las dos Guerras Mundiales y la Guerra del Vietnam. En todos y cada uno de esos conflictos bélicos la fotografía de guerra ha sido un factor decisivo en las relaciones internacionales.
Recordemos a autoras como Susan Sontag que nos hace reflexionar sobre ello mediante su libro “Ante el dolor de los demás” (Regarding the pain of others) de 2003. En este trabajo literario Susan nos plantea una importante pregunta: ¿Cómo afecta el espectáculo del sufrimiento de los otros a través de los medios de comunicación? Podéis leer mi artículo sobre ello en este enlace del blog: Susan Sontag.
Las primeras incursiones en dejar testimonios gráficos bélicos interesantes fueron durante la guerra de Secesión de Estados Unidos. Se permitía la publicación de fotografías con las víctimas de las batallas. Se justificaban ante la premisa de que “la cámara era el ojo de la historia”. Se tenía un concepto claro de que había que dejar constancia de aquellos bélicos encuentros y la fotografía era un buen aliado para hacerlo.

Pero la fotografía puede ser manipulada, amañada… hábiles fotógrafos tenían el arte del retoque fotográfico y empezaron a “cambiar la realidad”. Un ejemplo de aquella época lo tenemos en fotografías como The Valley of the shadow of death. Dirt road in ravine scattered with cannoballs donde el fotógrafo en su laboratorio hizo posible cambiar la imagen colocando varias bolas de cañón sobre el camino cuando en realidad solo había bolas al borde del mismo en la fotografía original.


Existen otros ejemplos…
La cámara del fotógrafo Capa que capta el momento justo en el que un soldado republicano de la Guerra Civil española de 1936 es abatido por un disparo del enemigo. Esta fotografía ha tenido su polémica incluida relacionada con la veracidad de la misma. ¿Manipuló Capa el instante para ofrecer una imagen de impacto?
Otro ejemplo de manipulación fotográfica lo encontramos en el levantamiento de la bandera norteamericana por parte de unos soldados en la colina de Iwo Jima en 1945. Al final se decidió cambiar en el proceso fotográfico la bandera original por una más grande para recordar quienes habían vencido.

Sin embargo a partir de la guerra de Vietnam los reporteros gráficos ya no son partidarios de cambios en las imágenes captadas. Tienen la conciencia de querer ofrecer al mundo la pura realidad de la guerra. Sin trucajes, sin el empleo de ninguna manipulación en el papel de la fotografía.
Aquí uno de los ejemplos más claros quizás lo encontramos en la fotografía en la que aparece la famosa niña que corre junto a un grupo de niños espantada y totalmente abrasada por el bombardeo de napalm en una carretera de Saigón en 1972. No hay lugar para posar, todo es real y cruel. La fotografía consiguió ser premio Pullitzer en 1973.
